jueves, enero 6

no tengo mucho... que escribir

¿Alguna vez te has sentido frustrado? ¿Alguna vez te has sentido desilusionado? …Considera esto. Frustración y desilusión no provienen de las circunstancias. Después de todo, la misma situación puede hacer sentir totalmente frustrada a una persona mientras que para otra, no merezca siquiera pensarlo.

Frustración y desilusión provienen de la propia noción de que las cosas podrían ser mejores. La frustración es posible sólo gracias a mi capacidad de imaginar un mundo mejor. Me siento frustrado porque tengo una imagen positiva, porque veo y sé cuánto mejor podría ser la vida.

Y pienso…

¿No es genial? La próxima vez que me sienta frustrado, recordaré que no estoy simplemente frustrado o desilusionado. En cambio, estaré ocupado imaginando un mundo mejor. Tendré esto presente, y la frustración se convertirá en una fuerza positiva, enfocando mi mente no en la situación, sino en las posibilidades.

Me conectaré hasta lo más profundo del núcleo positivo de mi frustración, y cultivaré algo magnífico a partir de allí. Usaré la energía de mi frustración para desarrollar las poderosas posibilidades que esa frustración presupone.